Una importante área temática de la Estrategia Nacional de Inclusión Financiera (ENIF) es la educación financiera. La evidencia señala que la educación financiera permite mejorar la capacidad de las personas para manejar sus finanzas personales y la administración de su dinero.

En este sentido, el mes de diciembre es cuando más se necesita aplicar criterios adecuados para manejar el presupuesto, puesto que en esta época del año las personas esperan impacientemente el aguinaldo y se enfrentan a la difícil decisión de gastar el dinero en necesidades o deseos.

Sin embargo, antes de dar recomendaciones es importante recordar que el aguinaldo es una remuneración anual adicional que es la resultante de la suma de todo lo percibido en concepto de remuneraciones devengadas en un año dividido doce meses. 

Otro dato importantísimo es que el aguinaldo, de acuerdo con las normas vigentes, es inembargable e irrenunciable. Esto significa que ninguna entidad comercial o de crédito puede descontar el aguinaldo para obligar el pago de una deuda, ni por orden judicial alguna el trabador puede ser privado del mismo para saldar otro tipo de obligaciones. Asimismo ningún empleador puede exigir al trabajador que renuncie a este pago.

A continuación presentamos cinco recomendaciones para aprovechar mejor el aguinaldo:

Hacer un presupuesto. Es muy importante planificar en que se utilizará el aguinaldo antes de recibirlo. De lo contrario podríamos vernos tentados en gastar un gran porcentaje del aguinaldo para satisfacer deseos de consumo innecesario motivados por ofertas, descuentos.

Ahorrar para imprevistos. Es recomendable no gastar todo el aguinaldo. El ahorro puede servir para hacer inversiones a futuro, tales como reparar o ampliar la casa, financiar la educación o comenzar un fondo para un emprendimiento. Pero también es importante para ser usado como fondo de emergencia para enfrentar eventos imprevistos como enfermedades, accidentes o siniestros.

Pagar deudas y otras obligaciones. El aguinaldo puede ser destinado al pago de deudas pendientes como préstamos, tarjetas de crédito y servicios. Esta puede ser una excelente oportunidad de lograr un alivio económico en el ingreso mensual en los siguientes meses al librarse de altos intereses o penalizaciones por mora. También puede ser la oportunidad para ponerse al día con otras obligaciones como el impuesto inmobiliario y otros gastos anuales.

Capacitación laboral. Mediante cursos cortos con alto impacto en la empleabilidad que asegure una salida laboral rápida (electricidad, mecánica, telefonía móvil, refrigeración, etc).

Darse un gusto. Lógicamente con el aguinaldo no se puede hacer todo lo que uno quisiera. Mucho depende del monto del salario que percibamos. No obstante, después de hacer un presupuesto también es importante darse un gusto. Tal vez un viaje o alguna actividad recreativa que nos permita reponer energías para iniciar el siguiente año.